Deficiencia de vitamina D: Síntomas, causas y soluciones
La vitamina D es crucial para el desarrollo saludable de los niños, ya que juega un papel vital en la absorción del calcio y la formación de huesos fuertes. Sin embargo, la deficiencia de vitamina D es un problema creciente que puede afectar el crecimiento y el bienestar general de los más pequeños. En este artículo, explicaremos las causas, los síntomas y las consecuencias de la deficiencia de vitamina D en niños.
¿Por qué necesitamos la vitamina D?
La vitamina D es fundamental para la absorción del calcio, esencial para la estructura ósea. Además, desempeña un papel crucial en el sistema nervioso, muscular e inmunitario.
Existen tres formas de obtener vitamina D: a través de la exposición solar, la alimentación y los suplementos. Aunque la piel produce naturalmente vitamina D bajo la luz solar, es importante regular la exposición para evitar riesgos como el envejecimiento prematuro y el cáncer de piel, llevando a muchas personas a buscar otras fuentes de esta vitamina.
¿Cuánta vitamina D necesitamos?
La cantidad diaria recomendada de vitamina D varía según la edad. Aquí están las cantidades recomendadas en unidades internacionales (UI):
De 0 a 12 meses: 400 UI
Niños de 1 a 13 años: 600 UI
Adolescentes de 14 a 18 años: 600 UI
Adultos de 19 a 70 años: 600 UI
Adultos mayores de 71 años: 800 UI
Mujeres embarazadas y lactantes: 600 UI
Es importante destacar que las personas con alto riesgo de deficiencia de vitamina D pueden requerir dosis adicionales. Consulta a tu profesional de la salud para determinar cuál es la cantidad adecuada para ti.
La falta de vitamina D puede resultar en una disminución de la densidad ósea, aumentando el riesgo de osteoporosis y fracturas.
Una deficiencia severa de vitamina D también puede llevar a otras enfermedades:
En niños, puede causar raquitismo, una enfermedad poco común que provoca el ablandamiento y la deformación de los huesos. Los bebés y niños afrodescendientes tienen un mayor riesgo de desarrollar raquitismo.
En adultos, una deficiencia grave de vitamina D puede provocar osteomalacia, una condición que causa debilidad ósea, dolor en los huesos y debilidad muscular.
Síntomas
En los lactantes con raquitismo, todo el cráneo es blando
Los menores de 1 año tardan más tiempo de lo habitual en sentarse y en gatear, y los espacios entre los huesos del cráneo (fontanelas) tardan más en cerrarse
En los niños de 1 a 4 años, el crecimiento óseo suele estar alterado, por lo que se presentan desviaciones en la curvatura de la columna vertebral (escoliosis), piernas arqueadas o rodilla valga. Estos niños tardan más tiempo en comenzar a caminar
Los niños mayores y los adolescentes sienten dolor al andar. La carencia grave de vitamina D puede causar piernas arqueadas o rodillas juntas. Los huesos pélvicos de las chicas adolescentes se aplanan, con lo que el canal del parto se estrecha
En los adultos los huesos son débiles, sobre todo en la columna vertebral, la pelvis y las piernas; pueden sentir dolor al tacto en las zonas afectadas, y ser propensos a sufrir fracturas
¿Cómo podemos obtener más vitamina D?
La deficiencia de vitamina D en niños es un problema que no debe ser subestimado, ya que puede tener consecuencias graves para su crecimiento y desarrollo óseo. Asegurar una adecuada ingesta de vitamina D a través de una combinación de exposición moderada al sol, una dieta balanceada y, cuando sea necesario, suplementos, es fundamental para prevenir condiciones como el raquitismo y asegurar una salud óptima.