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¿Sabías que los bebés pueden usar diez o más pañales por día? ¡Así es! Los padres de un recién nacido pasan mucho tiempo cambiando pañales. Inicialmente, el proceso de cambiar un pañal puede parecer desafiante. Sin embargo, con práctica, descubrirás que mantener al bebé limpio y seco es una tarea simple.

¿Cómo prepararte?

Antes de comenzar, prepara algunos artículos:

  • Un pañal

  • Broches (si estás utilizando pañales de tela)

  • Un recipiente con agua tibia y algodón (para bebés con piel sensible) o un paño limpio o toallitas para bebé

  • Ungüento para la zona del pañal o vaselina (para prevenir y tratar las erupciones)

  • Un cambiador o pañal de tela para colocar debajo del bebé

Asegúrate de tener todos estos elementos a tu alcance. Nunca dejes a un bebé sin supervisión, ni siquiera por un momento. Incluso los recién nacidos pueden sorprender a sus padres con su capacidad para rodar.

Limpieza

Usando el paño húmedo, algodón o toallitas para bebés, limpia con suavidad al bebé de adelante hacia atrás (evita hacerlo de atrás hacia adelante, especialmente en el caso de las niñas, para prevenir la propagación de bacterias que pueden causar infecciones del tracto urinario). Es posible que necesites levantar las piernas del bebé sosteniéndolo por los tobillos para limpiar debajo. No olvides los pliegues de los muslos y las nalgas.

 

Mantén al bebé cubierto durante el cambio, ya que la exposición al aire a menudo provoca que orinen (sobre ti, las paredes o cualquier cosa cercana).

Después de limpiar, seca al bebé con un paño limpio y aplica ungüento en la zona del pañal.

 

Pañales desechables

Si el bebé usa pañales desechables:

 

1.- Despliega el pañal y colócalo debajo del bebé, levantando con suavidad sus piernas y pies. Asegúrate de que la parte posterior, con las tiras adhesivas, esté al nivel del ombligo del bebé

2.- Eleva la parte delantera del pañal entre las piernas del bebé hasta llegar al ombligo

3.- Envuelve el cuerpo del bebé con las tiras adhesivas y ajustalas firmemente, siendo cuidadoso de no ponerlas sobre la piel del bebé

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Pañales de tela

Si el bebé usa pañales de tela:

 

Los pañales de tela tienen diversas formas y tamaños. Los modelos tradicionales son cuadrados y requieren sujetadores, mientras que los más modernos se asemejan a los desechables y cuentan con cierres de velcro o broches a presión. Además, hay accesorios como revestimientos, pañales extra absorbentes para la noche y cubiertas para prevenir filtraciones.

Si optas por pañales de tela tradicionales, hay varios métodos para colocarlos. Uno común es el pliegue triangular:

 

1.- Dobla el cuadrado formando un triángulo (para bebés pequeños, dobla la parte más larga para un mejor ajuste)

2.- Coloca al bebé sobre el pañal, deslizándolo debajo y asegurándote de que el triángulo más largo quede bajo la espalda

3.- Levanta la parte delantera entre las piernas del bebé hacia el ombligo

4.- Rodea el cuerpo del niño con uno de los lados, cubriendo la parte central

5.- Repite con el otro lado y sujeta todas las partes con un alfiler con gancho

¿Cómo prevenir la dermatitis?

Es habitual que los bebés experimenten cierta dermatitis del pañal. Sin embargo, si la erupción es persistente, dura más de 2 o 3 días, o se agrava, es crucial contactar a un profesional de la salud. Informa al profesional si tu bebé presenta fiebre junto con la erupción o si esta causa dolor, tiene un tono rojo intenso o muestra ampollas.

Para prevenir y aliviar la dermatitis del pañal, considera los siguientes consejos:

 

  • Realiza cambios de pañal de manera frecuente, especialmente después de que el bebé haya tenido un movimiento intestinal. Limpia el área con suavidad, evitando frotar o hacerlo de forma vigorosa, ya que esto podría empeorar la irritación

 

  • Aplica un ungüento para la zona del pañal que contenga óxido de zinc para prevenir y tratar las irritaciones

 

  • Proporciona tiempo libre de pañal a tu bebé durante parte del día, colocándolo sobre paños. (En el caso de niños, coloca un pañal de tela sobre el área genital cuando estén boca arriba para evitar mojarlo)

Con estos consejos, cambiar el pañal de tu bebé se volverá una tarea más sencilla y cómoda tanto para ti como para tu pequeño. Recuerda que cada bebé es único, y con un poco de paciencia y práctica, encontrarás la rutina y los métodos que mejor se adapten a sus necesidades. Además de ser un momento para la higiene, cambiar el pañal también puede ser un momento especial de conexión y cariño entre tú y tu bebé.

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